Presentado en "Monologueando", diciembre de 2016
Biblioteca Silvina Ocampo, UNNOBA
Eche otra mi amigo, eche otra giñebra, ¿que si tengo plata?, No se preocupe. Eche otra nomás, que tres no son nada y este cuerpo aguanta mucha más.
Y como le iba
contando, es cosa de no creer, se lo tuve que decir al patrón y Dios sabe lo
que me costó, no quería saber nada de enfrentarlo, porque él ha sido siempre
muy bueno conmigo. Si le digo que estoy trabajando con él hace más de quince
años y nunca un sí ni un no, siempre con respeto me ha dispensado y yo le he
cumplido también porque yo no soy ningún desagradecido, y eso que me fue cambiando
de campo en campo, porque el patrón por hay vendía y por hay compraba y hay estaba
yo, fiel a los cambios.